La nueva red se presenta en una recepción con la asistencia de Su Majestad el Rey Carlos III del Reino Unido, antes de la COP28 en Dubai (EAU).
La nueva iniciativa, impulsada por la Circular Bioeconomy Alliance y el secretariado de la Commonwealth, suma los conocimientos científicos e indígenas sobre los incendios forestales para crear paisajes resilientes.
Entre las iniciativas previstas figuran la actuación sobre el terreno a través de Living Labs y el desarrollo de herramientas financieras innovadoras con el sector financiero.
La Red de Paisajes Resilientes a los Incendios Forestales se ha presentado en una recepción a la que asistió Su Majestad el Rey Carlos III del Reino Unido, el 30 de noviembre, antes del comienzo de la COP28, en Dubai.
En un esfuerzo por liderar la transición hacia paisajes resilientes a los incendios, la Alianza para la Bioeconomía Circular ha creado la Red de Paisajes Resilientes a los Incendios Forestales junto con la Secretaría de la Commonwealth. La red aúna conocimientos indígenas y científicos para desarrollar Living Labs que demuestren cómo crear paisajes resilientes para hacer frente al creciente problema de los incendios forestales en zonas del mundo propensas a sufrirlos. La iniciativa trabajará con el sector financiero para desarrollar herramientas innovadoras (por ejemplo, en torno a los mercados emergentes de la Naturaleza) que puedan generar las inversiones necesarias para apoyar la transición hacia paisajes resilientes.
De izquierda a derecha: Val Charlton (FIRE-RES), Antoni Trasobares (director del CTFC y coordinador del proyecto FIRE-RES), Marc Palahi (director de la CBA), Ruth Ryan (FIRE-RES), y Sam Johnston (director de ISFMI) durante la sesión de trabajo del 29 de noviembre.
El proyecto europeo FIRE-RES y la Savanna Fire Management Initiative (ISFMI) han sido invitados a sentar las bases de la nueva red.
FIRE-RES aportará su conocimiento científico y el ISFMI contribuirá con su conocimiento y experiencia autóctonos únicos en materia de riesgo de incendios forestales.
El cambio climático está provocando incendios forestales sin precedentes, ya que la extinción de incendios ha alcanzado sus límites. El mundo está siendo testigo de una escalada de víctimas humanas y de graves consecuencias para la salud, así como de enormes pérdidas económicas, un aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero y una pérdida catastrófica del mundo natural. Este verano hemos sido testigos de incendios forestales extremos, y Canadá está viviendo la temporada de incendios más grave de la que se tiene constancia. Se han quemado más de 18,5 millones de hectáreas (hasta el 2 de octubre), lo que ha provocado la emisión de más de 2.200 millones de toneladas equivalentes de CO2, que probablemente triplican las emisiones anuales de gases de efecto invernadero de toda la economía canadiense.
También se necesitan herramientas financieras innovadoras que desempeñen un papel catalizador. En la actualidad, los costes relacionados con la prevención de incendios forestales y la gestión del paisaje proceden de subvenciones públicas, lo que resulta insuficiente para hacer frente a la magnitud del problema a escala mundial. Las asociaciones público-privadas y la financiación privada son cruciales para desplegar inversiones a escala que permitan aprovechar las nuevas tecnologías y crear un nuevo modelo de diseño de paisajes resistentes y resilientes. En este contexto, los mercados del carbono y posiblemente también los futuros mercados de la biodiversidad ofrecen una interesante oportunidad para la financiación privada.
FIRE-RES es un proyecto internacional de investigación e innovación que trabaja en el desarrollo de estrategias holísticas e integradas de gestión del fuego para abordar el problema de los incendios forestales extremos de manera eficiente y eficaz. El consorcio FIRE-RES está formado por investigadores, organismos de respuesta a emergencias, empresas tecnológicas, industria y la sociedad civil de 13 países, que enlazan con redes más amplias de ciencia y gestión de la reducción de catástrofes. El Centro de Ciencia y Tecnología Forestal de Cataluña (España) coordina el proyecto FIRE-RES, financiado por el programa de investigación e innovación H2020 de la Unión Europea.
El programa de gestión de incendios en la sabana del norte de Australia es un buen ejemplo de cómo el conocimiento indígena puede ser la base de nuevas herramientas financieras que generen ingresos para las comunidades indígenas, al tiempo que apoyan paisajes resilientes a través de los mercados de carbono. La red se basará en el trabajo de la Iniciativa Internacional de Gestión de Incendios en Sabanas, que ha desarrollado tecnologías punteras basadas en enfoques de gestión tradicional de incendios (TFM, por sus siglas en inglés) aplicados en la gestión de tierras durante generaciones, generando al mismo tiempo créditos de carbono. La aplicación de la TFM ha aportado importantes beneficios adicionales, como la creación de puestos de trabajo basados en el mercado en comunidades remotas y vulnerables, y la mejora de la biodiversidad, la seguridad alimentaria y la salud.
La secretaria general de la Commonwealth, la Honorable Patricia Scotland KC, ha declarado: “La Commonwealth espera contribuir a esta oportuna colaboración sobre la resiliencia a los incendios forestales. Nuestro trabajo sobre el clima se basa en el intercambio de conocimientos, desde ayudar a los países vulnerables a desbloquear el acceso crítico a la financiación climática hasta el desarrollo de capacidades relacionadas con el clima y la promoción de una gestión de la tierra sostenible y resiliente al clima”.
Marc Palahí, director general de la Alianza para la Bioeconomía Circular, ha declarado: “Nos sentimos honrados de acoger esta red que se basará en el éxito de nuestros Living Labs y conectará los puntos entre la ciencia, el conocimiento indígena y el sector financiero para permitir un enfoque holístico en la creación de paisajes resilientes a los incendios forestales. Mientras los líderes se reúnen para acordar medidas climáticas en la COP28, el inicio de este esfuerzo de colaboración facilitará un progreso vital sobre el terreno que trabaja para integrar la resiliencia, al tiempo que contribuye a la protección de la naturaleza, así como a los esfuerzos de adaptación y mitigación del clima”.
Antoni Trasobares, director del CTFC y coordinador del proyecto FIRE-RES, afirma: “Esta alianza permitirá desarrollar nuevos marcos legales para impulsar la creación de instrumentos financieros innovadores que, a través del capital privado, complementen la financiación pública tradicional para gestionar el territorio. A través de su participación en la Red de Paisajes Resilientes a Incendios Forestales, el proyecto FIRE-RES expandirá su actividad más allá de su red actual de Living Labs, como por ejemplo en Australia, Sur África o Canadá, al tiempo que consolida los enfoques de ampliación mediante herramientas financieras innovadoras”.
Cissy Gore-Birch, del Comité Asesor de la ISFMI, ha declarado “Reactivar las prácticas indígenas de gestión de incendios es una oportunidad para compartir nuestros conocimientos con el mundo, asegurar el futuro de todos y unirnos”.
Last modified: 5 Diciembre 2023
